Cuando das un beso a tu pareja lo haces con los ojos cerrados, cuando quieres sentir un buen olor, lo haces con los ojos cerrados y cuando deseas aumentar una buena sensación ya sea táctil o gustativa también cierras los ojos. ¿Por qué entonces no probar hacer sexo con los ojos tapados, no cerrados? Si tapas los ojos a tu pareja y juegas con ella no sólo disfrutará el doble la otra persona sino que tú te sentirás más excitado y el sexo será más original y completo para ambos.
Muchas parejas ya lo hacen, es muy habitual pero no está muy generalizado. Se vendan los ojos y así no pueden ver ni predecir nada de lo que van a sentir. Con los ojos tapados no sabrás si te van a besar ni dónde, no sabrás si te van a acariciar ni dónde, no sabrás absolutamente nada y esta máxima expresión del cuerpo se traduce en emoción, excitación, placer absoluto y pérdida total de control.
Lo más usual es atar a la otra persona con una cinta los ojos y acto seguido atar sus manos y sus pies al objeto que sea (silla, mesa, cama, etc.) de manera que se le impida apartarte cuando te acerques. Parece una escena porno pero en realidad, es de lo más natural porque eliminando este gran sentido del ser humano, la vista, consigues aumentar otros sentidos como el tacto y el olor. Por tu olor, la otra persona podrá deducir por qué parte de su cuerpo le vas a sorprender y por el tacto podrá descubrir nuevas sensaciones que la vista nos priva. Hacer sexo de esta manera puede llegar incluso a ser una experiencia orgásmica sin necesidad de llegar al coito. Pues este acto sexual final de una pareja con los ojos cerrados es el clímax más deseado por todos.
Una buena idea puede ser experimentar la nueva forma de compartir el amor y el sexo de manera conjunta. Así, ninguno de los dos sabe lo que van a besarle, tocarle o acariciarle y, al mismo tiempo, tampoco va directo a una parte del cuerpo de la otra persona, sino que más bien va palpando diferentes zonas como un invidente en estado puro haría.
El sexo es divertido y placentero pero añadir nuevos valores que incrementen su sentido y su originalidad es mucho mejor. No hay que ser muy raro para probar cosas nuevas y mucho menos algo que tan sólo aporta beneficios como es el caso de hacer sexo con los ojos tapados, por ejemplo con un antifaz sexy. Después de conocer esta nueva forma de hacer sexo, no querrás nunca más hacer sexo con los ojos abiertos y la luz encendida.